domingo, 15 de abril de 2007

El efecto de los CAT en la agroexportación

OPINIÓN I Las agroexportaciones no tradicionales sólo tienen dos incentivos: la excepción de impuestos y el Certificado de Abono Tributario (CAT). Ambos incentivos han contribuido a compensar las distorsiones internas y las desventajas competitivas que el sector ha confrontado durante toda su historia. La excepción de impuesto nos permite participar en los mercados con igualdad de condiciones frente a otros países de la región que tampoco pagan impuestos por sus exportaciones agrícolas.
En tanto, los CAT son un instrumento que ha permitido constituir las garantías crediticias para poder tener acceso a la banca comercial y a los distribuidores de insumos. También han permitido amortizar las caídas de los precios en el mercado y, en algún porcentaje, a mitigar parte de los incrementos en los costos de exportación, sobre todo envases y fletes.
Para el periodo 2006-2007, en la agroexportación participaron unas 57 empresas y unos mil 500 agricultores como proveedores de fruta, que en la práctica se constituyen en los beneficiarios directos de los CAT. Desde 1984 y hasta el año 2007, la agroexportación ha significado un sacrificio fiscal (CAT) para el Estado de 37 millones de dólares, pero a su vez la economía ha recibido un beneficio aproximado de 475 millones de dólares en concepto de ingresos, por los productos que se han exportado en esos 23 años, de los cuales, el valor neto luego de la intermediación es de tan solo 30 millones de dólares.
Pero lo más importante de los resultados de este aporte estatal es que ha permitido al país generar unos 30 mil empleos agrícolas anuales, lo cual contribuye, aunque de manera temporal, a resolver la problemática del desempleo en las áreas rurales del país.
También es importante señalar que el patrimonio agrícola (equipos y plantas empacadoras instaladas) es de aproximadamente 40 millones de dólares, suma que supera a los CAT recibidos. Al igual que otros gremios empresariales, el sector agrícola de exportación cree que, mientras se sostengan estos incentivos, los mismos deben estar sujetos a revisión y análisis fiscal.

viernes, 13 de abril de 2007

Argentina: un tour de ventas


Para aumentar sus exportaciones, varias empresas argentinas tienen como alidados a las grandes tiendas departamentales y supermercados internacionales que, por su facturación, se comparan con el mercado de un país.


Con la ruta principal empantanada, la Argentina salió a buscar caminos alternativos para aumentar sus ventas al exterior. En ese recorrido las grandes tiendas departamentales y supermercados del mundo ganaron un espacio protagónico. No se trata de cuestiones viales sino del intento por sortear la virtual parálisis que produce el congelamiento de las negociaciones comerciales internacionales. Si las conversaciones con países y bloques económicos con los que se buscan tratados de libre comercio o mejoras arancelarias no prosperan, los acuerdos con gigantes del sector privado aparecen como una buena alternativa. Adivinanza: ¿cuál es el mercado que abastece a 250 millones de consumidores por semana? El pequeño país se llama Wal-Mart. El supermercado norteamericano factura 3400 millones de dólares al año, es el primer vendedor al público del mundo y uno de los principales objetivos comerciales de la Argentina. "Defendemos una tesis: es tan valioso negociar con Wal-Mart, Carrefour o Metro en el nivel mundial como hacerlo con muchos países con los que querríamos tener un tratado de libre comercio", explicó a LA NACION el director ejecutivo de la Fundación ExportAr, Marcelo Elizondo. Unas pocas cifras alcanzan para tener en claro de qué se trata. Las exportaciones argentinas superaron el año pasado los US$ 46.000 millones. El principal destino en América fue Brasil, con el que se registraron ventas por US$ 7700 millones; le siguieron Chile (US$ 4400 millones) y Estados Unidos (US$ 4000 millones). Sólo un grupo de supermercados brasileños (Grupo Sonae, adquirido por Wal-Mart Brasil) factura US$ 2118 millones anuales. En Chile, Cencosud (propietario de supermercados Jumbo, Santa Isabel, Las Brisas y el centro comercial Alto Las Condes) factura US$ 1500 millones al año. "El principal mercado para la Argentina en materia de exportaciones es Brasil. Un acuerdo con un país implica no sólo negociar condiciones de acceso para ir allí sino que uno también tiene que conceder condiciones de acceso a productos y servicios. Cuando se negocia con una cadena, lo único que pide son productos buenos y baratos. Es un mecanismo que, en primer lugar, garantiza condiciones de acceso", agregó Elizondo. El aspecto más visible de la estrategia son las llamadas "semanas argentinas", que en muchos casos terminaron siendo "mes argentino". Se trata de un gran despliegue escenográfico y marketinero en el que el celeste y blanco invade las góndolas y pasillos de los supermercados y tiendas. Enormes carteles, fotos, acordes de tango, bailarines, cocineros, degustación de productos, todo sirve para llamar la atención de los clientes habituales del lugar.

martes, 10 de abril de 2007

Comercio Exterior pide que Evo y Chávez solucionen tema restricción




El nuevo presidente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Ernesto Antelo López, dio cuenta de la expectativa que tiene el IBCE en relación al encuentro que podrían sostener este fin de semana los Presidentes de Bolivia y de Venezuela, Evo Morales y su par Hugo Chávez, en el marco de la Cumbre Energética Sudamericana en Margarita, Venezuela, para superar la restricción que supone para las ventas bolivianas. Esa restricción a toda la exportación boliviana con destino al país bolivariano, fue impuesta hace más de un mes por Venezuela, a través de una Resolución de “Certificado de No Producción o Producción Insuficiente” exigido para el ingreso de más de un millar de productos, siendo requisito además para la exención del cobro del IVA (Decreto No. 5.212), y para el “engorroso” trámite de asignación de divisas de importación ante el Cadivi venezolano, “contradiciendo las normas del libre comercio vigentes en la Comunidad Andina de Naciones que Venezuela aún debe respetar (Art. 135 del Acuerdo de Cartagena), además de lo establecido por el propio Tratado de Comercio de los Pueblos (TCP) firmado con Bolivia y Cuba, señaló el ejecutivo del IBCE. Al valorar la actuación del Ministerio de Producción y Microempresa, a través del viceministro de Comercio y Exportaciones, Pablo Rabczuk, la preocupación mostrada por el Ministro de Planificación, Gabriel Loza Tellería, que vinieron a suplir la falta de una reacción oportuna de la Cancillería boliviana “que no supo aprovechar la presencia del Presidente venezolano en Bolivia a inicios de marzo para solucionar este problema”, el Presidente del IBCE dijo que por el trabajo realizado y las contundentes pruebas aportadas, todo indica que podrían haber buenas noticias desde Caracas luego del fin de semana. Para Ernesto Antelo López, la solución a las restricciones del libre comercio que se presentan con Venezuela, no debe ser de índole parcial, sino de pleno cumplimiento en la normativa de la Comunidad Andina.


EL DATO ESTADÍSTICAS. Según datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística (INE), Bolivia exportó en la gestión unos 50 productos a Venezuela, por un valor de 195 millones de dólares, de los cuales 193 millones corresponden a oleaginosas; derivados de soya y de girasol, así como grano de soya.

jueves, 5 de abril de 2007

Aumentaron un 35% las exportaciones agropecuarias al Mercosur

El dato corresponde al primer bimestre de 2007, con respecto a igual período del año anterior.
Las ventas, que totalizaron U$s 466,3 millones, tuvieron como principales destinos a Brasil y Venezuela. Trigo, ajo, cebada y merluza, los productos preferidos.
Las exportaciones de productos agropecuarios a los países del Mercosur en el primer bimestre del año alcanzaron los 466,3 millones de dólares y registraron así un incremento de 35 por ciento respecto a igual período de 2006. Las 1,8 millones de toneladas exportadas al bloque en enero y febrero representaron además un aumento de 18 por ciento en volumen con relación a los envíos del mismo lapso del año pasado, informó hoy el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa). El principal destino fue Brasil, con más de 1,6 millones de toneladas de trigo, ajo, cebada, merluza y pera por 386,3 millones de dólares. El segundo destino para las exportaciones agroalimentarias argentinas hacia la región fue Venezuela, seguida por Uruguay y Paraguay.